Después de 2 meses de crecimiento, el gasto de los hogares en marzo de 2024 decreció 0,4% en términos reales y llegó a $83,9 billones, según el reporte mensual de Gastometría presentado por Raddar. Este comportamiento refleja una menor disposición de compra de los hogares en Colombia, donde la lenta contracción de la inflación no genera un alivio suficiente en el bolsillo.

“Entre subidas y bajadas, marzo de 2024, vuelve a mostrarnos un cambio en la tendencia, pues luego de un breve respiro, con dos meses de recuperación, el gasto real de los hogares regresa a terrenos negativos, pese a que la inflación continúa su lento camino de contracción”, dice el informe, tras recordar que tradicionalmente el tercer mes del año ha sido retador en cuanto al ritmo de gastos de las familias.

Por ejemplo, en marzo del 2023 las familias colombianas tuvieron que enfrentar la inflación más alta de los últimos años, por lo que tuvieron que tomar medidas para ajustar sus presupuestos de gasto.

Según el informe de Raddar, la colocación crediticia, sumando la causada con tarjeta de crédito, consumo, libre destinación e hipotecaria, tuvo un crecimiento anual de 10,1%, debido en su mayoría a la dinámica en colocación de crédito hipotecario frente al 2023 (53,6%).

Por su parte, la colocación con tarjeta de crédito tuvo un crecimiento anual de 3,9%, inferior a la inflación de 7,36%.

Concluye Raddar, que este comportamiento refleja una menor disposición de compra de los hogares en Colombia, donde la lenta contracción de la inflación no genera un alivio suficiente en el bolsillo. “Un año después del mayor pico inflacionario (13,34%) los hogares pueden mantener una posición cautelosa frente al gasto”, subraya.

Pese a este resultado, en el primer trimestre del año el gasto de las familias entra en terreno positivo y se sitúa en 0,18% y se situó en $261,1 billones, señala el informe.

En su análisis, Raddar dice que persisten los salarios y las rentas como los motores principales del gasto, pero llama la atención de que el declive en el mercado laboral puede ser un factor en contra, “mientras tanto, la capacidad crediticia permanece en un estado debilitado, añadiendo incertidumbre al panorama financiero”.

Según Camilo Herrera, fundador de Raddar, para el año 2024, en marzo el 70,24% de los hogares fue financiado por salarios, rentas y subsidio, en tanto que 21,46% por tarjeta de crédito y crédito de consumo y hace un año fue 21,53%. Además, un 4,25% se atribuyó a remesas, que decrece frente a 2023 (5,22%).

A continuación, el informe publicado:

RealRisk /Fuente: Raddar

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